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La clasificación de las plantas

La primera condición para poder cultivar una planta es conocerla; una vez conocida se podrá averiguar cuáles son sus exigencias, sus propiedades y se tendrá seguridad sobre sus aplicaciones. Desde muy antiguo el hombre ha sentido la necesidad de conocer las plantas, ya que de ellas obtenía sus principales alimentos, los diversos productos para su bienestar, armas para su defensa, y casi todos los medicamentos para curar sus males; después de conocidas debió designarlas y, por fin, agruparlas según el destino que le daba.

1. LAS DISTINTAS FINALIDADES DE LAS CLASIFICACIONES
A. Las clasificaciones utilitarias
Son las más primitivas; consisten en la agrupación de las especies según las aplicaciones que se les da: Plantas alimenticias, oleaginosas, textiles, perfumíferas, medicinales, etc.
B. Las clasificaciones artificiales
 Tienen como finalidad hacernos conocer las especies. Están basadas en pocos caracteres, fáciles de observar, como el número de estambres, la sexualidad, la estructura del tallo, la forma de las hojas, el color de las flores, etc. La clasificación sexual de Linneo (Systema naturae, 1748) que agrupa las plantas según el número de estambres de las flores, es artificial, pues conduce a la determinación de las familias sin tomar en cuenta su parentesco. En los sistemas artificiales las especies están reunidas en grupos arbitrarios, fundados en algún carácter sobresaliente, sin preocupación de la afinidad.
C. La clasificación natural
Su objeto es agrupar las plantas de acuerdo al parentesco, ordenándolas en un sistema lógico, fundado en la subordinación de los caracteres. La reunión de especies afines forma el género, y la agrupación de géneros afines forma la familia natural, entendiéndose por afinidad el grado de parentesco que vincula a las especies. Las agrupaciones son de diferente categoría; para establecerlas se toman en cuenta numerosos caracteres: morfológicos, anatómicos, histológicos, citológicos, fisiológicos, etc. y se los subordina de acuerdo con la importancia; en general cuanto más alta es la jerarquía de un grupo, menos caracteres lo definen, pero son caracteres profundos y generales como la presencia de la semilla que caracteriza a la División de las Espermatófitas, o el número de cotiledones que permite distinguir la clase de las Monocotiledóneas de las Dicotiledóneas.

2 . LOS TAXA VEGETALES
Dado el número muy elevado de especies existentes, unas 8,7 millones (2019) , ha sido necesario reunirías en grupos de distinta categoría para poder encarar su estudio. Tales agrupaciones han recibido el nombre de taxón (taxa plural) y expresan desde la  agrupación de mayor jerarquía, el Reino, hasta las más elementales: especie J’' Los nombres de los taxa admitidos por el Congreso Internacional de Botánica de 1950, son los siguientes, por orden de jerarquía. Reino
División
Clase 
Orden
Familia
Tribu
Género
Especie
Variedad
Forma
Línea
Clon.

En caso de ser necesarias más agrupaciones se intercalan otras entre las citadas y se designan anteponiendo el prefijo "sub" al nombre del taxón al cual se lo subordina: Suborden, Subfamilia, Subespecie, etc.
Fuentes citadas.

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